¿Notas que las luces de tu coche ya no iluminan con la misma intensidad que antes? Conducir de noche con una iluminación deficiente no solo es incómodo, sino que también supone un riesgo importante para tu seguridad y la de los demás conductores.
En Talleres AGM, tu taller mecánico de confianza en Albacete, te ayudamos a entender por qué ocurre este problema y qué puedes hacer para solucionarlo antes de que la avería vaya a más. Además, conviene recordar que el sistema de iluminación es uno de los elementos que más se deteriora con el uso diario, la exposición al sol, las vibraciones y los cambios de temperatura. Por eso, incluso aunque no hayas notado una pérdida extrema de luz, realizar revisiones periódicas puede evitar problemas futuros y garantizar una conducción mucho más segura.
Principales causas de la pérdida de intensidad en los faros
Hay varios motivos por los que los faros de un coche pueden perder potencia en la iluminación de tu coche. Estas son las causas más habituales:
- Avería en el cableado eléctrico: si el flujo de energía se reduce o se interrumpe, la luz emitida disminuye o incluso puede apagarse. A veces, el deterioro es interno y no visible a simple vista.
- Carcasa exterior deteriorada: el plástico que protege las bombillas se desgasta con el tiempo, reduciendo la transparencia y, por tanto, la intensidad. La radiación UV y la abrasión de la carretera son los principales responsables.
- Bombillas halógenas desgastadas: con el uso, estas bombillas se decoloran y emiten menos luz. Aunque sigan funcionando, su rendimiento cae progresivamente.
- Fallos en el sistema de carga o en el alternador: si el alternador no suministra suficiente energía, los faros no pueden funcionar a pleno rendimiento.
- Correa del alternador desgastada: si la correa patina o está floja, el alternador no trabaja bien y la luz se atenúa.
- Regulación defectuosa de los faros: un ajuste incorrecto puede hacer que el haz de luz esté demasiado alto o bajo, reduciendo su efectividad. Esto también afecta a otros conductores, ya que puedes deslumbrar sin darte cuenta.
Comprobaciones rápidas antes de ir al taller
Antes de pensar en una avería compleja, hay algunas revisiones sencillas que puedes hacer tú mismo:
Revisa la altura de los faros
Comprueba que la regulación es la correcta. Los faros de xenón y LED suelen autorregularse, pero si notas que alumbran demasiado alto o bajo, ajusta su posición. Un mal reglaje puede hacerte perder hasta un 40% de visión útil.
Comprueba las bombillas
Verifica que no estén quemadas ni tengan un tono amarillento o muy débil. Si necesitas cambiarlas, utiliza bombillas homologadas con la potencia y temperatura de luz adecuadas para tu vehículo. Muchas veces, cambiar ambas bombillas a la vez garantiza un haz de luz uniforme.
Limpia y pule las ópticas
La suciedad o el desgaste del policarbonato de los faros puede restar mucha luz. Una limpieza a fondo o un pulido profesional puede devolverle a las luces transparencia y brillo. Además, el pulido evita la difusión irregular del haz, que puede mermar la visibilidad nocturna.
Revisa el balastro (en faros de xenón)
El balastro regula la intensidad de las luces. Si falla, notarás parpadeos o una pérdida de potencia. Un taller puede comprobar su funcionamiento y sustituirlo si es necesario. Este componente es clave para mantener una iluminación estable.
Cuando el problema es más serio: cableado, alternador y correa
Si después de estas comprobaciones las luces siguen alumbrando poco, el fallo puede estar en el sistema eléctrico:
Fallo en el cableado de masa
El cable que conecta los faros al chasis (toma a tierra) puede corroerse o romperse. Esto provoca un flujo eléctrico irregular y hace que las luces pierdan intensidad o parpadeen. La solución es sustituir el cableado dañado, una reparación sencilla y asequible.
Avería en el alternador
Si el alternador no carga correctamente, los faros pueden alimentarse únicamente de la batería, reduciendo su intensidad. Un alternador defectuoso puede generar otros problemas eléctricos graves, por lo que es importante repararlo o sustituirlo cuanto antes. Además, este fallo provoca síntomas adicionales como dificultad para arrancar, testigos encendidos o fallos electrónicos.
Correa del alternador desgastada
Si la correa que mueve el alternador está floja o desgastada, puede deslizarse sobre la polea y provocar oscilaciones en la intensidad de los faros de luces. En estos casos, el taller decidirá si ajustarla o cambiarla. Ignorar este problema puede provocar roturas más costosas.
¿Por qué acudir a un taller profesional?
Algunos problemas de luces tienen fácil solución, pero otros requieren conocimientos y herramientas específicas. En Talleres AGM contamos con:
- Equipos de diagnóstico electrónico para detectar averías eléctricas.
- Profesionales cualificados en reparación y mantenimiento del sistema eléctrico y de iluminación.
- Recambios de calidad, incluyendo bombillas LED H7 homologadas de fácil instalación, encendido rápido y bajo consumo energético. Las bombillas LED H7 se han convertido en una de las opciones más recomendadas para mejorar la iluminación del coche gracias a su potencia, durabilidad y bajo consumo. A diferencia de las bombillas halógenas, que pierden intensidad con el tiempo, las LED mantienen un haz de luces más estable y con una temperatura de color más blanca, lo que mejora la visibilidad nocturna y reduce la fatiga visual al conducir. Además, su encendido es prácticamente instantáneo, algo especialmente útil en condiciones de poca luz o con cambios constantes entre cortas y largas.
Además, un técnico puede comprobar la alineación, medir la intensidad del haz y asegurarse de que las luces cumplen los estándares de la ITV. Conducir con faros en mal estado no solo es peligroso, sino que también puede suponer una sanción en la ITV o una multa.
Revisa la iluminación de tu coche en Talleres AGM
Si notas que los faros de tu coche iluminan menos de lo normal, actúa cuanto antes: revisa su altura, el estado de las bombillas y la limpieza de las ópticas. Si el problema persiste, lo más seguro es acudir a un taller mecánico en Albacete como Talleres AGM, donde diagnosticaremos el origen del fallo y lo solucionaremos con rapidez y garantía.
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