Seguro que más de una vez has oído hablar de la junta de la culata, pero ¿te has preguntado para qué sirve? ¿Qué hace en realidad? ¿Qué papel juega en el conjunto del motor de un vehículo? No es raro que los conductores que confían en Talleres AGM Albacete traigan su vehículo a nuestro taller mecánico con algún problema relacionado con esta pieza. Vamos a conocer mejor qué es la junta de la culata, qué función tiene y cuales son las averías más frecuentes de esta pieza.
¿Qué es la junta de la culata?
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La junta de la culata es la parte situada entre la culata y el bloque motor. Más que una pieza podemos decir que es una lámina que sella la zona para asegurar que los dos componentes quedan incomunicados. Evita que el refrigerante y el aceite del motor se mezclen durante el proceso de combustión. Para conseguir el hermetismo, la junta de la culata debe deformarse; además, debe superar temperaturas muy elevadas y altas presiones.
Lo más habitual es que la junta de la culata esté hecha de amianto y cubierta por dos láminas de cobre. Sin embargo, los materiales pueden cambiar según el tipo de culata, la compresión del motor o la rigidez que necesita. Por eso, también encontramos juntas de culata de una sola pieza hechas de aluminio o cobre, metálicas con una lámina de acero y canales de diferente profundidad, de composite o resinas recubiertas por chapa metálica.
Tipos de averías frecuentes en esta pieza
Las averías de la junta de la culata suelen ser fruto de un calentamiento excesivo, y son bastante caras de reparar. Por eso, detectar a tiempo las posibles averías o daños te puede ayudar a ahorrar dinero en la reparación. Una de las mejores formas de comprobar si la junta de la culata tiene daños es destapar el tapón del vaso de expansión con el motor en frío y dejarlo 12 horas. Si hay presión acumulada, deberías acudir al taller mecánico porque la junta de la culata estará dañada.
Otra señal de problemas en la junta de la culata es una temperatura del motor por encima de lo habitual. También un bajo nivel de líquido refrigerante, que te obligará a reponer continuamente el anticongelante sin que localices la pérdida. La presencia de aceite en el circuito anticongelante o de líquido anticongelante en el aceite del motor avisan de un problema en la junta. En este caso, verás que el nivel del aceite sube y que, además, tiene un color marrón, similar al del café con leche.
Problemas con el anticongelante del vehículo
En ocasiones, los problemas en la junta de la culata inutilizan un cilindro del motor. Si esto pasa, verás que tu vehículo expulsa agua por el tubo de escape. La razón es que el anticongelante se cuela por el cilindro afectado, y el coche lo expulsa a través del escape. Además del agua, notarás temblores o incluso fallos del motor porque este no tendrá todos los cilindros operativos. Un último indicador que nos revela problemas en la junta de la culata es el exceso de presión en los manguitos del circuito de refrigeración, o incluso su rotura en los casos más extremos.
Ven a Talleres AGM y repara la junta de la culata de tu coche
Sobre el papel, la reparación de esta avería es simple. Basta con cambiar la pieza dañada por otra nueva. Sin embargo, para acceder a la junta, hace falta desmontar diversos componentes y hacer un rectificado del motor en el taller mecánico, lo que convierte el simple cambio de la pieza en una operación algo más compleja que requiere un mayor tiempo de reparación. Siempre será importante revisar que otras piezas que integran el proceso no hayan quedado dañadas.
En Talleres AGM nuestros profesionales podrán realizar esta avería y otras reparaciones y puesta a punto de tu coche para que puedas tener la seguridad de viajar sin que tu coche presente ningún problema. Ven a visitarnos a Avenida Gregorio Arcos, 16 en Albacete, en la carretera de Madrid. Estaremos encantados de poder ayudarte y solucionar los problemas de tu coche.
