Tu coche puede tener una gran variedad de percances que requieran una visita a un taller mecánico. En muchos casos, ni siquiera hace falta que se produzca la avería. Existen síntomas que pueden alertarte de que algo sucede y, cuanto antes lo atajes, mejor. Esto es lo que suele pasar con el sistema de dirección.
Desde Talleres AGM queremos hablarte en profundidad de él.
¿Qué es el sistema de dirección del coche?
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El sistema de dirección es el mecanismo que permite al conductor dirigir la trayectoria del vehículo. Su función es la de orientar las ruedas motrices. Por norma general, estas son las delanteras. El movimiento de estas hace que el resto de la carrocería y del chasis sigan una dirección determinada.
Sin embargo, no todos los sistemas de dirección son iguales. Podemos diferenciar los siguientes:
- De cremallera. Son los más simples. Constan de un piñón que permite el giro a derecha o izquierda de las ruedas.
- De bolas recirculantes. Es el utilizado en camiones, autobuses y vehículos pesados en general.
- Hidráulicos. Poseen una bomba que se acciona al encenderse el motor. El sistema se ubica en el cigüeñal y utiliza un lubricante especial para producir el giro de las llantas.
- Electrohidráulicos. Son los más modernos. Poseen un motor eléctrico independiente del principal. Esto permite conservar íntegramente su potencia, sobre todo, en el caso de los vehículos de escasa cilindrada. Igualmente, facilitan ajustar la dureza del volante.
¿Qué componentes forman parte del sistema de dirección?
No importa el tipo de sistema del que hablemos. Estos elementos son comunes en todos ellos:
- El volante. Ubicado en el interior de la cabina. Mediante su giro el conductor puede dirigir la trayectoria del vehículo.
- La caja de la dirección. Es el elemento que transmite el movimiento de giro desde la barra hasta las ruedas.
- La barra de dirección. Une el volante con la caja de dirección. Puede ser una simple barra de metal.
- Uniones de rótula. O terminales de dirección. Transmiten el movimiento de la caja hasta las ruedas directrices. A su vez, en los modelos modernos absorben los impactos provocados por los baches de la carretera.
Síntomas y averías frecuentes en el sistema de dirección del coche
Como decimos, hay una serie de señales que pueden alertarte de que algo falla en el sistema de dirección de tu coche. Préstales atención y, si los detectas, llévalo a un taller mecánico de confianza como Talleres AGM en Albacete para que podamos resolver la posible avería:
- Ruidos al girar el volante. Lo más probable es que falte lubricación en el sistema debido a la pérdida de líquido o a la falta de cualidades de este. Debe ser sustituido inmediatamente. También conviene revisar el depósito en busca de fugas. Es un problema leve.
- Cuesta girar el volante o la sensación es más dura al hacerlo. Puede estar causado por la falta de lubricación. En los casos graves, se deberá a un desajuste entre la barra y la caja de dirección. Si cualquiera de las dos se rompe, no solo entrañará una avería grave, sino también un incremento en el riesgo de sufrir un accidente al no poder controlar la trayectoria.
- Falta de precisión al realizar una maniobra. Lo más recurrente es que el sistema se haya desajustado y toque equilibrarlo de nuevo. Se trata de otra avería leve.
- Las ruedas no completan el movimiento de giro. Esto es lo más serio que te puede pasar. Probablemente, haya un problema grave en el eje que une ambas o en las rótulas. Puede ser necesario sustituir el sistema entero.
Como ves, el sistema de dirección de tu coche es bastante delicado. Sin él, preservar tu seguridad, la de quienes te acompañan y la del resto de conductores resulta imposible. Por tanto, si detectas cualquier incidencia, no dudes en venir a Talleres AGM. Nuestros profesionales estudiarán a fondo tu vehículo y solucionarán cualquier problema que pueda existir en el.
